Bajo el nombre de chapulín o saltamontes, se hace referencia en México a una gran variedad de insectos pertenecientes al orden Orthoptera, suborden Caelifera, familia Acrididae. A la fecha han sido descritas cerca de 11,000 especies de estos insectos en alrededor de 2,400 géneros
El chapulín se ha convertido en una de las principales plagas de los cultivos de maíz y frijol en zonas de temporal, esto se debe a su alta capacidad de reproducción, amplio rango de hospederos y hábitos migratorios. Las principales especies de chapulín que están atacando los cultivos de temporal en el centro de México son Sphenarium purpurascens, Melanoplus differentialis, Brachystola mexicana y Boopedon diabolicum, las cuales en términos generales pueden llegar a causar pérdidas en rendimientos del orden del 50 al 60% en cultivos de granos básicos y se ha observado que pueden disminuir entre un 30 y 40% la producción de forraje; por lo que es muy importante controlarlas de manera oportuna antes de que causen daño y se dispersen a otras zonas. Se alimentan de hojas, tallos y frutos tiernos, de granos básicos, leguminosas, hortalizas, frutales, entre otros.
La estrategia de manejo integrado de chapulín incluye el muestreo, control biológico, control cultural, control físico y control químico. Las estrategias de manejo integrado del chapulín buscan reducir los niveles de infestación de la plaga con fundamento en el muestreo para determinar los niveles poblacionales. Es importante que tanto los agricultores como los profesionales fitosanitarios en la protección de cultivos adopten una actitud preventiva en el manejo del chapulín