La Yaca, el fruto de todos los sabores
La yaca (Artocarpus heterophyllus) es un frutal tropical originario del sureste de la India, aunque se encuentra distribuido también en Australia, Isla Mauricio, Kenia, Uganda, Brasil, Jamaica, Las Bahamas, Estados Unidos (Florida y Hawái) y México. Esta especie pertenece a la familia Moraceae, cuyos frutos varían en peso, de 1.6 a 25 kg, aunque se han reportado frutos que alcanzan 50 kg. Los árboles sin manejo de poda pueden crecer en cinco años de 8 a 25 m de altura y de 3.5 a 6.7 m de diámetro de copa. Los nombres comunes con los que se conoce a la yaca en el mundo son: jackfruit (inglés); bo loup mi (China); jacquier (Francia); nanka (Indonesia); jaca o yaca (español y portugués); lanka (Filipinas); kapiac (Nueva Guinea); uto ni India (Fiji); ulu initia (Samoa); chakka, chakki, kanthal, kathar, panos (India); jaca, jacca mole, jaca dura (Brazil); mit (Vietnam); khanun, makami y banum (Tailandia)
De los árboles de esta especie se aprovecha prácticamente todo; del tronco y las ramas, se obtiene madera; las hojas se usan como forraje de ganado y para cocinar; las semillas secas se utilizan en dulces o hervidas como aperitivo; los frutos se consumen en fresco, cocinados o procesados en jugo, helados o rodajas fritas. También se reportan beneficios nutracéuticos, toda vez que las hojas y la corteza se utilizan para tratar anemia, asma, dermatosis, diarrea, catarro y como expectorante. Los frutos tienen diversos compuestos, como carotenoides, flavonoides, taninos, esteroles, entre otros, que le confieren propiedades anti cancerígenas, además de que aliviar úlceras e indigestión. Las hojuelas de frutos maduros tienen 0.8% de minerales, vitamina A y tiamina y valor energético de la pulpa.
Las inflorescencias pueden tener más de 5,000 flores femeninas y masculinas; la receptividad de los estigmas se da en un periodo de 15 a 28 días posteriores a la emergencia; cada planta puede emitir de 8 a 103 inflorescencias femeninas al año y el proceso de maduración de los frutos tarda de 81 a 137 días desde antesis. El fruto es compuesto, ya que los ovarios de múltiples flores o de una inflorescencia se unen para formar un fruto, lo que origina que la superficie del fruto tenga una apariencia de panal; cada polígono representa una flor. En el fruto pueden distinguirse tres regiones primarias: a) eje o centro del fruto, con presencia de células laticíferas (no comestible); b) perianto, mayor porcentaje comestible del fruto y región media fusionada (formando el anillo del sincarpo) y la región externa córnea no comestible de color verde y amarillo al madurar; y c) fruto verdadero (semillas) que se desarrolla desde el carpelo del ovario y está rodeado por el perianto fresco.
En Florida se han reportado algunas plagas que atacan a la yaca, tales como insectos barrenadores que se alimentan de troncos y ramas dañadas o muertas, (Elaphidion mucronatum, Nyssodrysina haldemani, Leptostylopsis terraecolor), así como escamas (Pinnaspis strachani, Aspidiotus destructor, Protopulvinaria mangiferae, Protopulvinaria pyriformis) y cochinillas que atacan hojas y frutos. En relación con las enfermedades, las flores masculinas y femeninas son susceptibles al ataque de Rhizopus artocarpi y Botrytis cinerea. Se presenta también pudrición de raíces provocada por Pythium splendens, Phytophthora sp., Fusarium sp., y Rhizoctonia sp., sobre todo en condiciones de inundación. Las hojas pueden ser atacadas por Gloeosporium sp. y Phyllosticta artocarpi.
Fisiología postcosecha
No existe mucha información relacionada con las características fisiológicas del fruto, pero normalmente se cosecha después de los 81 días posteriores a la antesis, dependiendo de la región y del tipo de yaca cultivada. Normalmente, el color del pedúnculo y del fruto se utiliza como índice de cosecha, sin embargo, el índice puede depender del uso final del fruto, por ejemplo, industrialización o consumo como fruta fresca. En caso de que se dificulte la diferenciación de color, se puede realizar una lesión en el pedúnculo para provocar la salida del látex; el hecho de que éste no se coagule inmediatamente es un indicador de que el fruto está listo para la cosecha. El fruto es climatérico, con alta intensidad respiratoria.
En México no existe información disponible para los materiales adaptados sobre técnicas de producción específicas, como poda, nutrición, control de plagas y enfermedades; sin embargo, debido al nicho de mercado de exportación con precios atractivos para este fruto, ha provocado que cultivos de alta tradición como mango y plátano, sean desplazados por la yaca.
Fuente:
- Luna-Esquivel G, Alejo-Santiago G, Ramírez-Guerrero L. G, Arévalo-Galarza Ma. de Lourdes C. 2013. La Yaca, un fruto de Exportación. Revista Agroproductividad. Colegio de Postgraduados. México.