Las plantas presentan sistemas únicos de reproducción a través de los cuales se
puede estudiar la determinación del sexo, la expresión de masculinidad o feminidad.
Se pueden distinguir distintos tipos de plantas.
Plantas dioicas, monoicas y hermafroditas
Plantas dioicas. Son plantas que producen un único tipo de gametos y, por lo tanto, sólo forman flores femeninas o flores masculinas. Es decir, son unisexuales, cada individuo tiene su propio sexo. Los órganos reproductivos se presentan separados sobre plantas distintas. Por mencionar algunos ejemplo: los espárragos, kiwi, pistache, pimienta gorda, las espinacas o la papaya. El diocismo se da sólo en, aproximadamente, el 6 % de las especies de plantas.
Plantas monoicas. Son plantas con ambos sexos en flores unisexuales separadas. En la misma planta se dan órganos sexuales masculinos y femeninos situados en flores distintas pero de la misma planta. Por ejemplo el maíz, la cebada, el laurel o la higuera. En el caso del maíz, las flores macho son las terminales (panojas) y las flores hembra son las laterales (espiga). Diversos estudios hacen pensar que el maíz tiene una tendencia evolutiva hacia la diocia.
Plantas hermafroditas. Son plantas con los órganos masculinos y femeninos en la misma flor. Por ejemplo, manzano, naranjo o cebolla
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