Pudrición de la raíz y damping-off en tomate
Nombre científico: Rhizoctonia solani Kühn (Teleomorpho: Thanatephorus cucumeris).
Subdivisión y clase Agaricomycotina: Agaricomycetes.
Hospedantes
Este hongo es muy polífago. Afecta a un sinnúmero de especies cultivadas y es un problema importante en cultivos de trasplante. Entre las especies afectadas se encuentran tomate, pimiento, ají, poroto, papa, pepino y remolacha, entre otras.
Distribución e importancia económica
Es una enfermedad de distribución mundial. En tomate produce damping-off de pre y post emergencia, tanto en invernadero como en plantaciones al aire libre. Pudrición de la raíz es más severa en plantas estresadas o raíces con heridas. Los cancros en los tallos se favorecen con la poda, mientras que la pudrición de frutos se observa en climas tibios y húmedos.
Descripción y ciclo
Esta especie se divide en grupos de anastomosis genéticamente diferentes, que difieren en rangos de hospederos, patogenicidad y características de cultivo. El hongo crece muy bien en laboratorio en medio de cultivo a temperaturas entre 25-30°C. Al observarlo al microscopio, el micelio aparece hialino y sus ramificaciones forman ángulos de 90° con una pequeña constricción y un septo cercano a cada rama. Este hongo es un habitante común de los suelos, donde sobrevive como micelio o como esclerocios (estructuras de resistencia). Los propágulos del hongo pueden ser diseminados al mover suelo y partes de plantas contaminadas. La enfermedad es usualmente más severa a bajas temperaturas (15-18°C) y suelos moderadamente húmedos. Suelos secos e inundados tienden a inhibir el desarrollo del patógeno.
El hongo ingresa a la planta por heridas, pero también puede infectar tejidos jóvenes y suculentos directamente.
Síntomas
Plántulas en almacigueras pueden morir por Rhizoctonia antes o inmediatamente después de emerger. En plántulas que están emergiendo se observan lesiones que van desde bronceadas a rojizas. Después de la emergencia las lesiones se ven rojizas, marrones y cercanas a negro, y se ubican próximas a la línea del suelo. Los tallos jóvenes se empiezan a estrangular y a poner blandos; las plantas se caen y mueren. A medida que las plantas tienen más edad se vuelven tolerantes al damping-off.
Los síntomas en la raíz aparecen como lesiones de color oscuro o como pudriciones rojizas o marrones. Las plantas son más susceptibles a este daño si crecen bajo condiciones de estrés o tienen heridas (por ejemplo, daño de nemátodos). En la base de los tallos se pueden observar cancros que se caracterizan por ser lesiones hundidas de color marrón a marrón rojizo . Estas lesiones se pueden ir extendiendo hasta afectar las raíces de la planta.
Los frutos que entran en contacto con el suelo húmedo cuando las temperaturas empiezan a aumentar, pueden presentar pudriciones marrones que normalmente tienen bandas concéntricas cuya coloración alterna de claro a oscuro. La pudrición es bastante firme al principio, pero se vuelve rápidamente blanda a medida que el patógeno avanza y empiezan a invadirlos patógenos secundarios.
Métodos de control
- Las semillas deben ser tratadas con fungicidas para el control de Rhizoctonia y otras enfermedades del suelo.
- El sustrato para la producción de plantas en almácigo debe ser esterilizado o fumigado.
- En el campo el suelo puede ser fumigado o solarizado para bajar el inóculo inicial de la enfermedad.
- Las plantas deben ser bien fertilizadas y regadas para evitar el estrés que favorece el ataque de este patógeno.
- La aplicación al suelo de agentes de control biológico como Trichoderma spp. reducen el impacto de la enfermedad causada por R. solani.
- La mejor forma de evitar pudriciones de los frutos es no permitir el contacto de los frutos con el suelo
Bibliografia:
- Paz Millas O. 2017. Fitopatología – Enfermedades en hortalizas: Pudrición de la raíz y damping-off en tomate. Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA). Chile