Cancer bacteriano (Clavibacter michiganensis subsp. michiganensis) en tomate
El Cáncer bacteriano es una enfermedad muy seria del tomate, causada por Clavibacter michiganensis subsp. michiganensis (Cmm). La enfermedad se descubrió por primera vez en 1909 en Grand Rapids, Michigan, Estados Unidos, pero actualmente se ha reportado en áreas de producción de tomate de todo el mundo y anualmente ocurren algunos ataques de la enfermedad. Sin embargo, se pueden tomar medidas preventivas en todas las etapas de producción para evitar pérdidas por cáncer bacteriano.
La bacteria se transmite por semilla infectada y posteriormente penetra a los tejidos vasculares a través de heridas, estomas, tricomas e hidátides de la hoja (Gleason et al., 1993). El marchitamiento marginal de foliolos es uno de los primeros síntomas en plantas de todas las edades. Posteriormente aparecen estrías necróticas que se extienden desde la parte inferior del peciolo hasta el punto que se une con el tallo, ya que la bacteria es un invasor sistémico de tejidos del floema, médula y corteza. Finalmente la planta se necrosa y se marchita, y es característico que los bordes de foliolos inferiores aparezcan secos y curvados hacia abajo, y que luego adquieran un color castaño y necrótico con el peciolo unido al tallo. Bajo ciertas condiciones, las manchas necróticas se abren y forman cancros, como fuente de infecciones secundarias.